La victoria ante el Lauro de «Pepelu», dejaba connotaciones destacadas en el antequeranismo, la más importante acceder a puestos de «play off», por vez primera en la temporada y mostrando la cara de un equipo compacto al que no debe valer ese puesto, aunque también es cierto que los rivales que le preceden se están mostrando especialmente contundentes y sin fisuras tras este primer cuarto de competición ya disputado. A pesar de ello tampoco había motivos para la euforia anticipada cuando el calendario ya ofrecía para, este fin de semana, un nuevo y apasionante «derby» a disputar en «El Pozuelo», con el Torremolinos de anfitrión y con la necesidad de seguir sumando para no verse apeado de la privilegiada plaza ni tampoco ver ampliada su desventaja con los tres de arriba (El Palo, Jaén y Linares), hecho que implicaba salir c0n poder de decisión para poder optar al mejor de los resultados. Sin embargo no fue así, y una salida indecisa de los antequeranistas permitió a su rival encontrar demasiadas facilidades en ataque y a través de Miguel, primero, (M.4), y más tarde (M.16), del propio punta costasoleño para colocar un 2-0, que por momentos sacó a su adversario del terreno de juego impidiendo poder contrarrestar la efectividad en ataque de los hombres de Ibón Pérez que para colmo de males del cuadro de Aybar encajaba el tercero al borde del descanso tras una pena máxima convertida por Amaya (M.41). Salió con nuevos brios el equipo verdiblanco en la reanudación que a través de Joselillo pudo reducir (M.50), pero su remate lo sacó un defensor a corner. Luis si conseguía marcar (M.65) y arenglón seguido quien lo hacía era Toni Conejo (M.67). En ese momento empezaba otro partido en el que el empate rondó la portería de Ávila. Iván Aguilar (M.80) y Janpa (M.82), pudieron empatar pero finalmente el tanto no llegó pagando su mal inicio el once de José Aybar.