Izquierda Unida se ha hecho eco del retraso que están teniendo las obras de ampliación de la biblioteca de San Zoilo.
De esta forma, Fran Matas, candidato a la alcaldía de Antequera por IU, señaló que «a pesar de que las Nuevas Generaciones del PP alababan la labor de Manolo Barón y su compromiso con la juventud, gracias a su compromiso de aumentar las instalaciones de la biblioteca, se sigue sin tener unas instalaciones adecuadas para la población antequerana», a pesar de que, como anadió Matas, el proyecto se anunció en marzo del año pasado.
El grupo municipal de IU lleva dos años reclamando diferentes deficiencias en estas instalaciones, según afirmó Matas. Buen ejemplo de ello son las goteras en la sala de estudio o la conexión wifi «prehistórica», que, si bien es cierto que se ha mejorado este mismo año, aún es insuficiente. «Los usuarios pueden utilizarla solamente durante dos horas, por lo que luego se hacen colas para poder utilizar internet, lo que lo hace altamente inoperativo».
Además, el secretario general del partido también denunció la falta de personal. «Son necesarias al menos dos personas más para poder dar un servicio integral», aseguró Matas, quien además añadió que la capacidad de las instalaciones puntualmente es también insuficiente.
«La biblioteca necesita puntualmente más puestos de estudio, pero alquilar un local que no es municipal por 1.500 euros al mes no es la solución»
También habló del contrato de arrendamiento que el Ayuntamiento ha hecho del local contiguo a la biblioteca: un local que se viene arrendando desde el mes de julio, pero que en IU solamente han tenido noticias de él desde el pasado mes de diciembre, cuando se presentó en el pleno. «Llevamos desde julio pagando 1.500 euros al mes, y desde esa fecha hasta hoy aún no se ha realizado ninguna actuación en el mismo», sentenció Matas.
«Nosotros entendemos que este contrato que se suscribe por diez años, y que supone para las arcas municipales un total de 180.000 euros, no sería necesario si el Ayuntamiento de Antequera atendiera a las peticiones y soluciones que los propios ususarios de la biblioteca le aportan». Según Matas, estas carencias puntuales se podrían solventar con la reubicación de la sala de estudio en épocas de exámenes o de Navidad, con lo que se alcanzarían 24 puestos más de estudio, todo ello sin aumentar el gasto del Consistorio.
«Son necesidades puntuales las que sufre esta biblioteca, pero para nada entendemos que la solución pase por gastarse 1.500 euros de dinero público al mes en un alquiler, con unas obras que aún no han empezado y que encima se harán en un edificio que no es municipal, por lo que quedarán en beneficio del propietario del inmueble».