Dicha actuación se ha realizado dentro del PFEA 2019 con un presupuesto inicial de 136.000 euros que se ha ampliado con otros 11.000 euros de aportación municipal, empleando para ello a más de 30 trabajadores.

La calle Mancilla, enclavada en el Centro Comercial Abierto,  se ha reabierto hoy el tránsito de peatones y vehículos tras la finalización de la remodelación a la que ha sido sometida durante los últimos seis meses y medio, disponiendo ahora sí de una plataforma única que garantiza al cien por cien la accesibilidad y deja atrás los peligrosos y abultados bordillos que tenía antes, lo que imposibilitaba el paso de personas con movilidad reducida, sillas de ruedas, carritos o coches de bebé. Así lo ha dado a conocer el concejal de Obras, José Ramón Carmona durante una visita a la zona.

Para ello, se han invertido un total de 146.000 euros, 136.000 de los cuales corresponden al presupuesto global del proyecto en el PFEA 2019 a los que hay que sumar otros 11.000 euros adicionales aportados por el Ayuntamiento para el uso y contratación de una cuadrilla externa con la que poder finalizar dichas obras. En total, este proyecto ha supuesto la participación de más de 30 trabajadores. La duración de las obras asciende a 6,5 meses, un mes y medio más de lo previsto inicialmente debido al parón obligatorio provocado por la pandemia del virus COVID-19.

Precisamente se ha referido a ese hecho de forma concreta José Ramón Carmona, que ha reconocido las dificultades que, debido al confinamiento impuesto por el Gobier no de España en marzo y abril, las obras han sido muy difíciles de sacar hacia delante; de hecho, a pesar de contar con una prórroga hasta el mes de septiembre, Carmona ha confirmado que el conjunto de los proyectos acogidos al PFEA 2019 se encuentran ya de forma global al 97-98 por ciento de ejecución, por lo que se espera terminarlos todos en apenas unos días.

La calle Mancilla cuenta ahora con una plataforma única, dispuesta en su calzada central para vehículos con adoquín de granito que suena levemente para, precisamente, alertar al peatón del paso de coches o motos. En cuanto a las aceras, siguen la disposición de la contigua calle Merecillas, con costeras de granito asegurando así una accesibilidad del cien por cien.

La conclusión de esta calle conlleva también la finalización de la remodelación integral de una de las arterias comerciales más importantes de la ciudad como es el eje comprendido entre la alameda de Andalucía y la calle Lucena, pasando precisamente tanto por Merecillas como por Mancilla. En total se han remodelado medio kilómetro de vías públicas desde el año 2017, sustituyendo los antiguos y altos bordillos por una plataforma única que cuenta también con una pavimento más artístico al sustituir el antiguo asfalto por adoquines de granito en la calzada de vehículos. Todo ello, complementado además por otras obras en la zona como son las realizadas en calle Plato, Toronjo o Chimeneas, perpendiculares o paralelas a Merecillas y Mancilla, “unas obras que hacen ciudad, una ciudad abierta a sus vecinos, a los peatones, al comercio y al turismo”, concluye José Ramón Carmona.