
Se han instalado un total de 30 luminarias distribuidas por toda la plaza, de las cuales ocho lámparas en forma de gotas colgantes iluminan el interior del monumento y destacan su característica estructura octogonal
La Plaza Ochavada de Archidona luce a partir de ahora un nuevo alumbrado que realza la belleza arquitectónica de esta joya del urbanismo barroco andaluz del S.XVIII.
Esta nueva actuación, con una inversión cercana a los 200.000 euros, ha dotado a la plaza de una luminosidad cálida que rodea todo el recinto a través de ocho lámparas gota colgantes en su interior – diseñadas por los arquitectos Herzog & de Meuron, ganadores del Premio Pritzker– que eliminan cualquier sombra que la desluciese, devolviéndole su singularidad y espacialidad, en consonancia con su relación con el casco urbano de la ciudad.
En concreto, se han utilizado 30 luminarias distribuidas por toda la plaza, de las cuales ocho resaltan el interior del monumento y su estructura octogonal, además de otras adicionales sobre los cuerpos superiores de las tres fachadas que conforman el ayuntamiento. En conjunto alcanzan una potencia instalada de alrededor de 1.264 Watios, permitiendo una reducción significativa del gasto energético y su impacto en cuanto a emisiones de CO2.
Hasta ahora, la plaza presentaba multitud de instalaciones y cables obsoletos, grandes focos empotrados en la fachada y farolas abrazadas a las rejerías de los balcones. Esta configuración generaba manchas muy profundas de luz en las aristas, pero dejaba el espacio central en penumbra.
Se culmina así el proyecto anunciado en mayo de 2024, fruto del convenio firmado entre el Consistorio y la Fundación Iberdrola España, que ha financiado los trabajos.
Inauguración
El alcalde de Archidona, Manuel Almohalla, y el presidente de la Fundación Iberdrola España, Jaime Alfonsín, inauguraron anoche el alumbrado junto con la delegada de la Junta en Málaga, Patricia Navarro; el parlamentario andaluz, José Ramón Carmona; el diputado provincial, Juan Rosas; el director de la Fundación Iberdrola España; Ramón Castresana; el delegado institucional de la compañía en Andalucía, Antonio Fernández y el arquitecto responsable de la intervención, Jesús Castillo, quien explicó a los presentes los criterios técnicos de iluminación y de diseño.
Navarro puso de manifiesto el «firme compromiso» de la Junta de Andalucía con la protección, conservación, y puesta en valor del patrimonio histórico y cultural con la región. «Sabemos que cuidar nuestro patrimonio no es un lujo, sino una responsabilidad colectiva. Cada piedra, cada edificio, cada rincón como esta plaza Ochavada, nos habla de quienes somos, de nuestra historia compartida y de los valores que queremos transmitir a las generaciones futuras».
Asimismo, recordó la importancia de la colaboración entre administraciones publico-privada, como es este caso, ya que «benefician directamente a la ciudadanía”.
El presidente de la Fundación Iberdrola España, puso el acento en la importancia que representa en Andalucía la Plaza Ochavada. «Una plaza que es referente del urbanismo andaluz y del barroco. Un lugar que aúna historia y tradición, donde se puede apreciar la vida social que transita por ella. Una serie de factores de suma importancia para la Fundación, pues responden a la perfección a nuestro programa de iluminaciones, donde priman las técnicas más vanguardistas en iluminación buscando maximizar el esplendor de nuestro extraordinario legado patrimonial”.
Por último, el alcalde puso en valor la colaboración entre el Ayuntamiento y la Fundación Iberdrola, impulsores del proyecto. «Damos un nuevo paso para que este enclave brille también de noche, exaltando su belleza y acogiendo aún mejor a quienes lo visitan. Este proyecto convierte a nuestra ciudad en ejemplo de cómo la iluminación consciente puede integrarse al ambiente histórico y fomentar la actividad turística y cultural. Porque el patrimonio bien iluminado es el patrimonio que podemos disfrutar y compartir», ha concluido.
Sobre la Plaza Ochavada
La Plaza Ochavada constituye el principal punto de encuentro de los vecinos del pueblo y unos de los grandes atractivos turísticos para los visitantes. Ubicada en pleno casco histórico, bajo la falda de la sierra de Gracia, es una joya del urbanismo andaluz del siglo XVIII, una mezcla entre el urbanismo francés que recuerda a la Plaza Vendôme de París, y una fuerte influencia de la tradición mudéjar, que da como resultado una de las plazas públicas más emblemáticas de nuestro país.
Además de ser considerada un monumento de interés cultural, desde 1981 figura dentro del Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz (CGPHA) y en 2007 recibió un reconocimiento popular como ‘Primera Maravilla de la Provincia de Málaga’.
Fue construida en 1786 por los alarifes locales Antonio González Sevillano y Francisco Astorga Frías, quienes propusieron una construcción tan original como una plaza octogonal u ochava dotándola de monumentalidad y de un diseño visualmente muy atractivo.
El interior conjuga en sus fachadas la armonía del ladrillo rojo, a juego con el blanco de la cal, el ritmo ordenado y claro de su estructura, la sobria decoración arquitectónica de evocación clásica, con un innegable sabor popular, al estilo del patio andaluz.






