Paco Ramírez, presidente de la Confederación Española LGBT COLEGAS, y Antonio Ferre, presidente de ANDALUCÍA DIVERSA LGBT, se reunieron la pasada semana con el Obispo de Málaga, Jesús Catalá para discutir desde el respeto y la educación las discrepancias que han surgido en los medios recientemente. Es la primera vez que un Obispo de Málaga se reúne con organizaciones LGBT.
Tras unas semanas de diálogo y conversaciones, se ha propiciado este primer acercamiento y reunión, con el que se han expuesto los posicionamientos respectivos, y las versiones de los hechos desde ambas partes de las reiteradas polémicas surgidas en los medios de comunicación sobre declaraciones del Obispo acerca de los homosexuales y las uniones homosexuales, y sobre las denuncias realizadas por COLEGAS de unos hechos que desde el colectivo se consideran denigratorios e insultantes hacia el colectivo LGBT.
Jesus Catalá ha explicado que sus declaraciones han sido manipuladas y tergiversadas reiteradamente por parte de los medios de comunicación, o sacadas de contexto. Según él, en ningún momento ha atacado a los homosexuales, y que no se considera homófobo, y que siempre tiene respeto para todas las personas, incluyendo a los homosexuales, y sigue fielmente las mismas palabras del Papa Francisco, “¿quien soy yo para juzgar a nadie?”. Catalá cree que los medios han creado una figura ficticia homófoba, que no existe, que no se corresponde con su persona.
Desde COLEGAS se le ha solicitado al Obispo que sea consciente de las palabras que usa al defender la Doctrina oficial de la Iglesia Católica, y que las formas importan, porque se puede herir a muchas personas homosexuales creyentes. También se le dijo que no ser homófobo no es sólo no discriminar directamente a las personas, y que para combatir a esa figura ficticia lo más razonable era que se posicionara a favor de los derechos LGBT.
Desde ambas partes se espera que esto sea el inicio de una colaboración que de frutos, y que salga a relucir lo que une más que lo que diferencia. Y que con esto se pueda ayudar a muchos homosexuales creyentes que sufren mucho con un tipo de discurso condenatorio.