Los abuelos del presidente de Dcoop, Antonio Luque, se conocieron en una almazara. Seguro que ni ellos mismos imaginaban que años después su nieto haría llegar el aceite de la comarca de Antequera a todo el mundo. Un sueño que comenzó como una pequeña empresa con un capital que apenas superaba el millón y medio de pesetas y que desde 2016 su facturación anual supera el millón de euros. “Esperamos que la facturación de 2017 esté en torno a los 1.075 millones de euros. Volvemos a crecer y no es que defendamos el crecer por crecer sino que siempre buscamos la eficiencia y eficacia en nuestras secciones y la liquidación positiva de nuestros socios, con proyectos estables y eso lleva consigo que se vayan incorporando más productores al proyecto que es lo que realmente nos hace crecer”, asegura Luque en la entrevista que ha concedido a Las4esquinas.
Un proyecto del que hoy forman parte 154 cooperativas a nivel nacional y que convierte a Dcoop en una de las empresas agroalimentarias más importantes del país. “Queda mucho trabajo por hacer, pero los precios del aceite están a un buen nivel que, aunque influyen muchos factores, es fundamental que entre todos estemos haciendo un buen trabajo”, explica.
Este año la campaña avanza bien, solo en Málaga se espera recoger más de cincuenta millones de kilos de aceituna para aceite y de ellos unos treinta se recogen en la comarca norte, un trabajo que realizan unas 10.000 personas. “El sector en esta zona sigue siendo muy importante, miles de personas, familias, dependen del olivar. De una campaña que está en el ecuador, y que a pesar de la sequía de los últimos años el 2017 no ha sido el peor y la producción se espera mayor y con una muy buena calidad que dará como resultado buenos aceites”, detalla.
El aceite español está reconocido en todo el mundo pero para Luque hay mucho por hacer. “A pesar de ser los primeros productores aceite de oliva del mundo no es suficiente hay que marcar las pautas del mercado a nivel mundial porque hay unos competidores duros y en estas campañas que estamos bien hay que pensar en las malas”, añade.
Estados Unidos se ha convertido en uno de los mercados objetivos en los que ya se ha consolidado el consumo de aceite, un importante mercado en el que Dcoop se ha ido abriendo paso y por el que apuesta ahora más que nunca tras el acuerdo con la norteamericana Pompeian, la que más vende en Estados Unidos. “Es el primer país consumidor de los no grandes productores de ahí que ya trabajemos en este proyecto donde hay dos plantas de envasado, con unos 50 millones de litros de aceite. El trabajo tiene que ser que esos litros vayan subiendo y crezca el consumo”, explica Luque.
Luque destaca en este recorrido por su empresa el trabajo humano del grupo de trabajadores y socios agricultores y ganaderos que son el alma de Dccop, proyecto que nace del sueño de un grupo de olivareros que han conseguido que nuestro aceite sea ya sinónimo de oro líquido a nivel mundial.