En la plaza Nueva del Saucedo destaca una obra mural del artista Mister Kaikus inspirada en el mito griego de Caronte y que representa, de forma inversa, el viaje que realizan los artistas hasta el pueblo saucedeño, su nuevo hogar
Villanueva del Rosario ya es conocido por todos como un lugar de acogida para los artistas. Lo fue en su día para el pintor y grabador internacionalmente conocido, José Hernández, que fijó allí su segunda residencia en el año 1980. Desde entonces, este pueblo de la Sierra Norte de Málaga se ha convertido en el hogar de otros muchos creadores. Actualmente, el municipio saucedeño es un hervidero de expresiones artísticas, hasta tal punto que han llegado a formar parte de su ‘ADN’.
En homenaje a este gran recibimiento y a la figura de Hernández, el artista plástico Mister Kaikus ha elaborado en la plaza Nueva de Saucedo ‘El Éxodo’, una obra mural de 15 metros de largo inspirada en el mito de Caronte, el barquero encargado de transportar las almas a través de la laguna Estigia, la frontera entre el mundo de los vivos y el mundo de los muertos.
En esta obra mural se invierte el recorrido. Se representa la salida de los infiernos para llegar a la vida doméstica, apacible y amable. Se toman algunas obras de José Hernández como referencia gráfica, simbólica y temática, así como la trayectoria personal del artista, hijo adoptivo de la provincia que falleció en 2013 a la edad de 69 años tras una larga enfermedad.
Composición y significado
De izquierda a derecha se observan diferentes escenas cargadas de simbolismo. Primero, se ve el inframundo, que representa el lugar de donde parte el artista, el sitio que le rechaza y que de alguna manera le obliga a marcharse. Se construye sobre la figura de Cancerbero, perro de tres cabezas que custodia el inframundo , el reino de Hades y se representa por la arquitectura más esencial, un pórtico rodeado de cipreses, el árbol que conecta el cielo y la tierra, lo vivo y lo muerto.
Por otro lado, está el paso de la laguna Estigia, que representa el viaje del artista repudiado hacia un lugar mejor, donde pueda encontrar su sitio, inspirarse y seguir creando. En esta escena aparece Caronte, el barquero, transportando al artista en su barca sobre una laguna Estigia seca, creando un surco sobre la tierra. El destino: Villanueva del Rosario, que se representa con la portada de la ermita de la Virgen del Rosario, una arquitectura que remite al municipio y que se asocia a la bienvenida, la civilización y el paraíso.
«Los mitos de la cultura clásica griega son una fuente de inspiración recurrente para el arte pictórico. En sus héroes, sus mitos y sus dioses se inspiran artistas de todos los tiempos de la talla de Rubens, Miguel Ángel, Da Vinci, Botichelli, Tiziano, Klimt o el mismo Goya entre muchos otros. Estas historias muestran la naturaleza y la esencia del ser humano, por eso siguen estando vigentes y se han convertido en clásicos», explica el artista, que comenzó su carrera profesional en 2014 y, que como bien ha plasmado en su mural, encontró un oasis a las faldas de la sierra de los Camarolos y el Jobo.