Ayer comenzó a funcionar y hoy se ha inaugurado la residencia municipal de Humilladero sobre los terrenos donados por Consuelo y en los que el Ayuntamiento invirtió en diferentes fases 1,5 millones de euros de los 2 millones totales.
El centro tiene 19 plazas para residentes y 60 en unidad de estancia diurna. Está gestionada por la cooperativa Fonserrana. Así, se cumple el deseo de Consuelo Galisteo, vecina de Humilladero que donó unos terrenos de su propiedad al Ayuntamiento para que levantara en ellos una residencia para mayores, se ha hecho realidad.
El centro tiene 19 plazas para residentes y 60 en unidad de estancia diurna. Está gestionada por la cooperativa Fonserrana. Así, se cumple el deseo de Consuelo Galisteo, vecina de Humilladero que donó unos terrenos de su propiedad al Ayuntamiento para que levantara en ellos una residencia para mayores, se ha hecho realidad.
“Es una enorme satisfacción después de tanto tiempo y esfuerzo a nivel personal y económico, tener un recurso como éste para dar servicio a mayores de Humilladero y de municipios cercanos”, ha señalado la alcaldesa de Humilladero, Noelia Rodríguez. “Salvo a alguna aportación de la Diputación, y para el mobiliario de la Junta de Andalucía, el principal aporte de la inversión fue del Ayuntamiento por lo que para nosotros es un objetivo cumplido porque hay que revalorizar y dignificar el papel de la tercera edad que cada vez tiene menos recursos para satisfacer sus necesidades”, ha indicado la regidora humilladerense.
El gerente de la cooperativa Fonserrana, Bernardo Porras, ha señalado que tras la apertura ayer de la residencia, ésta ya cuenta con siete usuarios y va a ir en aumento. “Está habiendo demanda, esperamos poder tener el centro en pleno rendimiento y tendrá nueve trabajadoras, se parte con trabajadores de experiencia ya que también contamos con la residencia de Fuente de Piedra y posteriormente se irá ampliando para prestar una atención de calidad”, ha señalado Porras.
Ubicada a pies del paraje natural de la Sierrecilla, la residencia cuenta con dos plantas libres de barreras arquitectónicas, habitaciones, comedor, salas de usos múltiples y formación, cocina, dependencias administrativas, almacén, gimnasio, entre otros, todo con mobiliario específico y adaptado para la comodidad de sus usuarios.