Entre el bullicio propio del día a día que impide parar, Carmen Becerra encuentra el tiempo para crear mundos. Esta funcionaria pública, aficionada desde siempre a la escritura, ha dado rienda suelta a lo que siempre ha sido su pasión con la publicación de su primer libro en solitario: En el umbral de Rebeca Mundo, una colección de relatos cargados de misterio y fantasía.
De cuartillas olvidadas a un libro que emociona
“Siempre tuve esa inquietud de contar historias”, confiesa Carmen al recordar sus primeros pasos como escritora. Nacida en Málaga y residente en Antequera por trabajo, empezó escribiendo relatos que apenas compartía. Todo cambió hace diez años, cuando decidió convertir su afición en una parte esencial de su vida, ingresando en el Taller Antequerano de Escritura Creativa, un espacio que le permitió pulir su técnica y compartir su voz.
La autora ha colaborado en diversas antologías y revistas locales, además de obtener reconocimientos en certámenes literarios. Ahora, un nuevo reto llega de la mano de ‘En el umbral de Rebeca Mundo’, un libro que define como “una ventana a la imaginación”.
“Cada historia es una nueva experiencia que invita al lector a entrar en mundos cargados de misterios, reflexión y emociones profundas. Desde lo fantástico hasta lo cotidiano, lo absurdo, lo macabro y lo sublime”, detalla Becerra.
El libro reúne ciento cincuenta relatos que invitan al lector a viajar al umbral de otros mundos para desconectar durante unos minutos . “Fue difícil decidir cuáles incluir; todos tienen algo especial para mí”, señala. Entre sus favoritos destaca Hoy fui a dar un paseo, dedicado a sus padres, un relato cargado de nostalgia y sensibilidad.
Lo que más atrae de la escritura de Carmen es su estilo sencillo y conversacional, diseñado para que cualquier lector pueda sumergirse en sus relatos. “Escribo con pasión, pensando en que quien lea disfrute tanto como yo al escribir”, asegura. Este enfoque le ha permitido conectar con lectores de todas las edades, quienes han recibido su libro con entusiasmo.
Aunque En el umbral de Rebeca Mundo es su primer libro en solitario, Carmen tiene claro que no será el último. “Seguiré escribiendo relatos porque me apasiona inventar historias de la vida cotidiana”, afirma.
Para Carmen, la escritura es una forma de procesar emociones y vivencias. “A veces, escribir requiere recordar momentos difíciles, como la muerte o el dolor, pero también es una forma de transformar esas experiencias en algo bello”, reflexiona. “Los relatos van surgiendo a su tiempo, sin prisa, tienen ritmo propio”.
Ahora, con un libro propio en las manos, la escritora mira al futuro con ilusión. “Me siento feliz y tranquila, en equilibrio con las emociones”. Y no es para menos, ha logrado lo que muchos sueñan, hacer de su pasión un regalo para el mundo.
Si estás buscando una lectura que te transporte a lugares inesperados y te invite a reflexionar, En el umbral de Rebeca Mundo es una opción imprescindible. Un libro que invita a conocer nuevas experiencias y vivir emociones profundas de una manera delicada.