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La familia del padre que presuntamente mató a su hijo, de unos 40 años, hace dos semanas en la localidad malagueña de Antequera ha presentado un recurso para que salga de la cárcel mientras se desarrolla el proceso judicial.

Así lo ha confirmado el abogado defensor, que ha contratado la familia, quien detalló que el hombre, de 72 años lleva desde el lunes en la prisión de Alhaurín de la Torre por orden del juez después de que prestara declaración ese mismo día en el juzgado de instrucción número 2 del municipio antequerano.

El recurso contra el auto de prisión presentado por el abogado que lleva el caso se denomina recurso de forma y solicita la salida de la cárcel del padre del fallecido bajo tres supuestos: la libertad del hombre, una prisión domiciliaria o la libertad bajo fianza, todo, explica el abogado, a la espera de que se celebre el juicio.

Según fuentes del caso, el próximo 11 de febrero hay una prueba testifical con algunas de las personas que han declarado desde el momento de los hechos y que se consideran importantes en el proceso. Entre ellas, amigos de la familia o vecinos del edificio o la zona donde residía el detenido. Además, las mismas fuentes han confirmado que el presunto autor de los hechos, el progenitor de la víctima, se valió de un martillo con el que golpeó, presuntamente a su hijo en la cabeza mientras dormía.

Además, en estos días, los vecinos del conocido barrio antequerano San Juan, donde vive la familia, incluso han hecho público en los medios locales el apoyo al presunto autor de los hechos y han pedido también su puesta en libertad, recordando la situación «extrema» que vivía la familia. Los más cercanos ya relataron a este medio que las peleas del fallecido con sus padres eran constantes, que el hijo tenía antecedentes penales y sobre él había un arresto domiciliario que cumplía desde hacía unos meses después de estar unos dos años en prisión.

Precisamente, en la tarde del suceso, el viernes 18 de enero, los agentes se acercaron al domicilio de la barriada San Juan para asegurarse de la presencia del fallecido y el padre les contó lo ocurrido.