El presidente de la Diputación, Francisco Salado, ha informado, durante la presentación de este banco de terrenos municipales para la plantación de bosques que permitan la absorción de CO2, de que las comarcas de Antequera o Ronda podrían aumentar 1,3 grados en 2040, siendo uno de los principales culpables de este efecto el CO2 o el metano.

Un total de trece Ayuntamientos de la provincia de Málaga han cedido terrenos para su reforestación y para que por tanto, actúen como sumideros de carbono, como parte de la estrategia de la Diputación de Málaga de lucha contra el cambio climático que se enmarca en el programa Málaga Viva y con el que la institución provincial se encuentra «profundamente comprometida».

Los árboles –los bosques- son sumideros de carbono,  sirven para procesar el dióxido de carbono y generar oxígeno. Por ello, la institución provincial ha planteado este proyecto para conseguir eliminar el CO2 de la atmósfera y ayudar a paliar en parte este cambio climático.

El requisito para los Ayuntamientos es que al menos cuenten con una hectárea y que mantengan ese uso al menos durante un mínimo de 30 años. Asimismo, ha indicado que también es un llamamiento a las empresas que quieran ser patrocinadoras para reforestar los terrenos o que pretendan contribuir a la neutralización de la huella de carbono asociada a su actividad con proyectos de absorción.

Éstas  analizarían la zona, suelos, usos y propiedad para poder llegar a un acuerdo, de forma que la Diputación actuaría como intermediaria y facilitadora entre ayuntamientos que quieren reforestar terrenos de su término municipal y las empresas.

En todos los casos, las actividades y prácticas puestas en marcha deben buscar la persistencia de la masa forestal como mínimo hasta alcanzar el periodo de permanencia del proyecto. Los consistorios que quieran ceder terrenos, una vez informados, pasarán a formar parte del Banco de Terrenos municipales de la provincia de Málaga que se puede consultar en www.malagaviva.org.

De este banco de terrenos municipales ya se han alcanzado dos acuerdos con dos ayuntamientos malagueños. El primero de ellos ha sido Valle de Abdalajís, en el que el pasado fin de semana, se realizaron los trabajos de ahoyado y repoblación en tres parcelas cercanas al casco urbano en las afueras del pueblo que contaban con ejemplares dispersos de olivo y acebuche.

El presidente ha informado de que otro de los municipios que se repoblará de manera inminente será Ardales. Aquí está prevista la plantación de una ladera donde hay un antiguo vertedero sellado, mientras que la zona restante es un olivar sin uso. Los trabajos de ahoyado y la repoblación están previstos para los días 22 y 23 de noviembre.

Entre las ventajas que tienen estos proyectos para los ayuntamientos se encuentran la mejora paisajística y la revalorización de los inmuebles cercanos;  mayor infiltración de agua y recarga de acuíferos; prevención de la desertificación y de la erosión del suelo; amortiguación de las temperaturas extremas y del viento; creación de recursos (madera, biomasa, setas, resinas y piñones, etc); aumento de la biodiversidad; coste cero para el Ayuntamiento y la posibilidad de disponer de la propiedad del «vuelo» una vez realizado el proyecto de reforestación, y tener pleno derecho de aprovechamiento económico del total del «vuelo» una vez finalizado el período de permanencia.