Patatas recogidas en la Vega de Antequera

“Un muy buen producto, pero los precios no están han acompañado”. Este es el resumen que hacen en Horticultores El Torcal de la campaña de la patata en la Vega de Antequera que acaba de finalizar.

Para José Pacheco, encargado de personal de esta cooperativa, especializada en la producción y distribución de cebollas, espárragos y patata de la Vega de Antequera “el resultado es malo”. Lo dice así, sin medias tintas, y después ver como el precio del tubérculo esa ahora un tercio de lo que se vendía el pasado año.

En 2016 el kilo superaba los 30 céntimos -llegando a los 0,34-0,35 euros-, pero tras la temporada que acaba de finalizar la compañía está vendiendo su producto a sus clientes a sólo diez céntimos. Esta cifra contrasta con los 60 céntimos a los que se puede encontrar el kilo de patata en los mercados minoristas. “Vemos que los intermediarios se quedan con los beneficios”, se lamenta Curro Pérez, responsable del área de Administración de Horticultores El Torcal.

La sobreproducción es el principal factor al que aluden desde esta cooperativa para justificar esta “drástica” caída de los precios. Alentados por los precios de la campaña no son pocos los agricultores que han aumentado la extensión a la hora de sembrar este tubérculo. Y a eso hay que sumar unas condiciones climatológicas que han beneficiado que la producción pueda ser mayor. Hasta los 9 millones de kilos de patata, se ha ido la de Horticultores El Torcal, llevada a cabo fundamentalmente en la Vega de Antequera -aunque la cooperativa también cuenta con socios en tierras granadinas- y que puede suponer unos 5.000 jornales.

La mayor oferta de un producto puede provocar la bajada del precio, máxime si la demanda no aumenta igualmente o incluso baja. Y aquí es donde entra en juego la entrada de la patata francesa, que, aunque no es tan nueva como la española, llega al mercado con unos precios más bajos. “El consumidor compara una patata vieja francesa y una española nueva, y tal y como están las condiciones económicas… no se mira tanto la calidad del producto”, comenta Pérez resignado.

Desde el sector ya intentaron hacer campaña en medios de comunicación, promocionando la patata patria, pero este responsable de Horticultores El Torcal es consciente de que por ahora en muchas familias manda el bolsillo. “El que quiera consumir patata está en el momento adecuado”, subraya.

Menos modernización

Precios más bajos equivale a menos ingresos. En opinión de Pérez la última campaña va a dar prácticamente para cubrir costes al agricultor. Una circunstancia que trae consigo una consecuencia directa: la posibilidad de no poder hacer inversión en la modernización de los sistemas de producción y recolección, tal y como si se ha hecho años atrás.

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