Tras 154 años siendo una de las sedes comerciales de ganado más importantes de Andalucía, este pueblo de 1.400 habitantes ha adaptado su Feria Grande a los nuevos tiempos, pero siempre manteniendo sus raíces
La lluvia de este fin de semana no ha impedido al pueblo de Villanueva de Tapia disfrutar de una nueva edición de su Real Feria de Ganado, que desde 1869 y durante 154 años «ha sido una de las sedes comerciales de ganado más importantes que ha existido en Andalucía», ha afirmado el alcalde, Dionisio Aguilera, quien ha explicado también la evolución que ha experimentado el evento, adaptándose a los nuevos tiempos, pero siempre manteniendo sus raíces y tradiciones.
En este sentido, al mercado tradicional de ganado, principalmente equino, se le han ido sumando otras propuestas como la carpa comercial agroalimentaria y la exposición y venta de maquinaria agrícola. «Hemos ido cambiando y modernizando las cosas. El ganado ya no es tan importante para el día a día, por lo que hemos intentado diversificar la oferta. Con todo ello pretendemos que se mantenga el negocio y comercio que existía en aquella época», ha explicado, mostrando su orgullo tapiense. «Somos un pequeño pueblo que se vuelca con su feria y sus costumbres», ha subrayado.
A lo largo de cuatro días, han sido cientos las personas que se han acercado a esta localidad de 1.400 habitantes de la Sierra Norte de Málaga que a día de hoy sigue gozando de una ubicación privilegiada al ser cruce de caminos entre las provincias de Málaga, Granada y Córdoba, lo que en aquel tiempo fue crucial para ser incluido dentro de la ruta de tratantes de ganado de nuestro país. Actualmente, es uno de los encuentros más importantes del sector agrícola y ganadero de la provincia, declarado Fiesta de Singularidad Turística desde 2004.
Entre las actividades que se han llevado a cabo destaca la cuarta Recreación Histórica en la que los vecinos representaron el momento de la inauguración de la primera feria, precedido por un paseo en carroza de caballos por el recinto ferial de la condesa de Montefuerte, Ángela Muñoz de Salazar; el alcalde de la villa, Juan Joyera y el diputado provincial, Casimiro Herráiz. Asimismo, se llevó a cabo una escena teatralizada de un trato de compraventa de ganado, con el clásico apretón de manos.
También se realizaron exhibiciones de bueyes de la Axarquía, de herrado y esquila de ganado equino y de yunta mulos, así como talleres de biberón de chivitos y de elaboración artesanal de queso de cabra. Tampoco faltó el clásico concurso de vestidos de flamenca y la carrera de cintas a caballo. Además, la feria estuvo amenizada por diferentes actuaciones musicales, entre ellas, la de la panda de verdiales de San Gabriel de La Joya.
En el día de ayer, la Asociación Asno Pura Raza Andaluza (Asnopra) dio una conferencia divulgativa en torno a esta especie en peligro de extinción y se desarrollaron paseos con los animales.
Sin olvidar que tras el pregón de las fiestas, tuvo lugar el acto homenaje a los abuelos y a los niños de la feria, así como la proclamación de las damas, los caballeros y el nombramiento de la madrina y padrino de estas fiestas.