‘La Térmica Village’ hizo su parada en Antequera congregando a un gran número de visitantes durante todo el sábado.
El evento, de once horas continuadas de actividades, se celebró en el exterior del patio de los caballos de la plaza de toros. Un montaje camaleónico y versátil convirtió a este singular espacio antequerano en el recinto de un evento que abrió sus puertas a las doce y las cerró a las once de la noche para albergar contenidos pensados para todas las edades.
La banda granadina Radio Palmer y los antequeranos Plastic Woods, junto a los set de los DJ Mave& Akuna B2B y Jay Luna conformaron el cartel musical, al que se sumaron cursos de estampación, ilustración, espartería y el curioso taller titulado ‘Autoedición de cassettes’.
El escenario Cervezas Victoria acogió el primer concierto a la una y media. Fue la banda granadina Radio Palmer, fundada en 2018 bajo el paraguas del rock alternativo y el post-punk, la que lo llenó de música para comenzar la jornada festiva. En esta cita tocaron algunos de los temas de su último álbum, ‘La cara más triste’, sin faltar otros del popular ‘Juventud sónica’.
Por la tarde, a las ocho, fue el turno de Plastic Woods, banda de rock progresivo de la propia ciudad antequerana. Antes, desde las cuatro de la tarde, Mave& y Akuna B2B Dj set pusieron a bailar al público, y la noche se cerró con la propuesta de Jay Luna.
Habrá servicio de bebidas ofrecido por Cervezas Victoria y foodtrucks con una diversa oferta gastronómica.
Talleres y mercado
La música se complementó con talleres de la mano de Musketa, que propuso un taller para elaborar una de las piezas más tradicionales del oficio de la espartería, y Morteknife explicó diferentes técnicas para customizar una prenda de ropa o un bolso con diferentes materiales. Por su parte, Alba Zapata utilizó las barajas de cartas como soporte para realizar diseños e ilustraciones.
Además, Sarah Rasines impartió el taller ‘Autoedición de casettes’, en el que explicó las principales diferencias entre grabación analógica y grabación digital y mostró algunas imágenes de archivo de cassettes que se han hecho a lo largo de la historia. Los participantes crearon sus propias cintas, incluidas las carátulas, y llevárselas a casa.
El mercado fue otro de los puntos fuertes del evento, con puestos de decoración y diseño, joyas vintage, ilustración, piezas de esparto, crochet, serigrafía, fotografía analógica y moda.
Música, gastronomía, arte y diversión se dieron la mano en este evento, que consolidó su éxito en la ciudad de los Dólmenes.
