Siguiendo con los recuerdos de mi niñez creo que compartirán esas vivencias muchos de los mayores. Porque los años 50 la mayoría de los españoles vivíamos de la agricultura, en el ámbito rural. En mi caso, mis vivencias estuvo entre pequeños agricultores y trabajadores por cuenta ajena. No estuve relacionado con los grandes latifundios, en aquel tiempo tenía mucha importancia estrenar unos zapatos, camisa o pantalón.
Pero más importancia tenía la alimentación y los animales para consumo humano se criaban en las casitas del campo. El gallo, el conejo, el pavo, el cerdo o el chivo para navidad. Cuando la gallina cacareaba todos pendientes fuera a perder el huevo. Dicho esto paso a homenajear a quien siempre fue la reina de los animales y más en la casa de los pobres. “LA CABRA”
Un animal inteligente y agradecida, ella iba seleccionando la hierba que más le gustaba, y en verano rebuscaba las espigas en las rastrojeras y en invierno un cuartillo de habas, berza o mangarras conocí una cabra que a la llegada por la tarde buscaba un niño para darle de mamar, una teta para su chivo y otra para el niño y aún le quedaba leche para la tacita del abuelo. Todos pendientes de las ubres de la cabra.
Luego cuando se da el abandono del campo años 60 y 70 los pequeños agricultores se resistieron al abandono, los mayores en muchos casos echaron piarillas de cabras, unas 50 cabezas que guardaban, limpiaban corrales y ordeñaban a mano, esa leche hecha queso casi mantenía a la familia y los chivos de vendían a mejores precios que hoy.
Ya en los años 90 debido a las mejoras que se dan, luz, agua, carreteras, etc. ya ser ganadero cambiaba la historia. Mejoras en naves para ganado, piensos, forrajes, salas de ordeño, tanques de frío, etc. Ya para poder vivir del caprino hace falta sobre 500 cabezas, esto da trabajo al ganadero, señora y el niño cuando llega del colegio si le queda tiempo también es necesario, más vacunas, higiene en el ordeño, saneamientos, identificación, todo esto en la mayoría de los casos le supone al ganadero tener que endeudarse.
El ganadero de hoy necesita ser electricista, fontanero, medio veterinario y administrativo, la cabra lo quiere todo a sus horas, de lo contrario todo son pérdidas. Una piara de cabras no se le puede entregar a cualquiera.
Otro gran problema es la inestabilidad en precio del pienso, leche y carne. Otro problema es las administraciones para cualquier documento, te cuesta varios viajes. Luego llegan las normativas que probablemente las redacten y aprueben gente que no tiene ni idea del tema y son verdaderamente rompecabezas para el ganadero. De esto se puede escribir otro artículo, decir que si no estamos por el despoblamiento de los campos que la ganadería son cortafuegos para los montes, si estamos de acuerdo, defendamos el campo.