El alcalde de Antequera aclara que se trata de una actuación de mantenimiento del paraje natural que se integra con el entorno, evita accidentes y mejora la accesibilidad

Ante el revuelo que en las últimas horas han suscitado varias fotografías en las que se pueden ver varios palets de sacos de gravilla y rocas blancas esparcidas por senderos del Torcal de Antequera, el alcalde de Antequera, Manuel Barón, ha salido al paso para dejar claro que se trata de una actuación de mantenimiento ante el paso de miles de turistas por el paraje natural, y que ya se ha realizado con anterioridad otros años. «Si no se hiciera nada, habría tal número de surcos que los senderos serían impracticables y con el paso del tiempo, no se podría visitar El Torcal».

Concretamente, se está echando una «capa especial» de chinos blancos «que en principio pueden llamar la atención, pero que en el momento en que llueva, se van a pintar de marrón, se van a hundir en la tierra y se integrarán con el paisaje y el entorno».

El objetivo de esta actuación, que coordina la Delegación Territorial de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible de la Junta de Andalucía, tiene como objetivo crear una capa de tierra más estable para evitar accidentes tales como resbalones, torceduras y caídas «sobre todo cuando llueve». Además, se favorece en parte la accesibilidad para personas más mayores o niños. «Es una piedra natural que se va a integrar en el paisaje y con el entorno, se queda mimetizado y nadie se va a enterar de que hay una capa de piedra de canto rodado pequeño que facilitará el caminar y la accesibilidad en las rutas del Torcal», ha señalado Barón.

Medioambiente también está realizando este tipo de actuación en otros monumentos naturales de la provincia, pero «El Torcal de Antequera es el paraje natural más visitado de Andalucía» y según el alcalde, muchos turistas ya han trasladado sus quejas ante la peligrosidad de los surcos en los caminos de las rutas.

Por último, Barón ha pedido a los ciudadanos que no se alarmen y que «no se queden únicamente con la primera fotografía, sino con todo el desarrollo de la actuación», aunque para muchos antequeranos esto vaya contra la «naturalidad» del paisaje.