Según ha publicado el diario El País en su edición de hoy miércoles la Policía Nacional habría detenido a un hombre en Antequera por un presunto delito de abusos sexuales contra menores. El detenido, de unos 30 años de edad, trabajaba como monitor en un centro educativo de esta localidad desde 2016. Las mismas fuentes informan que fue una patrulla de la policía local la que se apersonó hasta la escuela para detener al presunto agresor, quien fue puesto a disposición judicial el pasado 16 de noviembre y quedó en libertad tras pagar una fianza.

Las mismas fuentes señalan que la investigación policial -aún abierta- había empezado semanas antes del arresto y culminó a mediados de noviembre. El detenido se encargaba de vigilar a uno de los grupos de menores que duermen en el colegio en régimen de internos. La noche era cuando supuestamente cometía los abusos. Según fuentes policiales, era el momento en el que aprovechaba para llevar al baño a sus víctimas, donde las agredía sexualmente. También se investiga si les suministraba un fármaco para adormecerles.

En declaraciones a El País, el director del centro escolar ha explicado que desconoce el origen de la denuncia, pero asegura estar “muy sorprendido” y no tener conocimiento de los motivos por los que se acusa al educador. Explicó también en la tarde del  martes que ningún chico o chica ha dejado la escuela por dichas circunstancias. Destaca haber colaborado “en todo momento” con las autoridades cuando éstas lo han requerido y desde el momento en que los agentes comunicaron la detención del educador. “Somos los primeros interesados en que la justicia haga su trabajo y se pueda aclarar toda la situación. Luchamos día a día para cuidar la integridad de todos y cada uno de los menores que están en la escuela”, señala.

Contratado desde 2016

El diario El País señala que el acusado fue contratado por primera vez en 2016, tiempo en el cual el monitor ha tenido diferentes contratos temporales en este tiempo en el recinto escolar. Precisamente, el último iba a acabar a mediados de noviembre, cuando fue detenido. Desde el centro subrayan que para su contratación se realizaron los mismos trámites que para cualquier otra persona de la plantilla, atendiendo a sus actitudes, aptitudes y experiencia. También ajustándose a todas las normativas vigentes, que incluyen la obligación de presentar el certificado de delitos de naturaleza sexual, documento oficial que recoge la ausencia o no de condenas por delitos de naturaleza única y exclusivamente sexual y que es requerido para quienes trabajan de manera habitual con menores.

Tras su detención, el educador pasó a disposición judicial el 16 de noviembre y quedó en libertad bajo fianza. Según fuentes judiciales, el caso fue entonces tomado por el Juzgado de Instrucción Número 2 de Antequera y posteriormente ha pasado a manos del número 3. La investigación policial continúa abierta.