Con la moral acrecentada y en todo su máximo apogeo tras un triunfo inesperado en Jáen en el que la decisión de ir a por el partido, sin condicionamientos, desde el principio marcó diferencias ante un adversario que no puede olvidarse que es el vigente Campeón de la Copa de España, eso sí, en horas bajas actualmente, la UMA Antequera volvía a ejercer de anfitrión esta pasada jornada para lo cual recibía la visita de un colista, momentáneo, como el Peñiscola castellonense dispuesto a sobreponerse de su mal inicio a costa de un adversario como el del Moli con el que probablemente tuviera que batirse el cobre en un futuro dado que son dos equipos con un posible objetivo común, el de la permanencia y en el que el peso de los puntos puestos en litigio pudieran valer su peso en oro.

De golpe y raiz todo el planteamiento a Moli se le vino abajo cuando con 20´´de partido una falta de concentración al lanzamiento de una falta permite a Eric Martel iniciar la cuenta goleadora de los suyos lo que les sirve para afianzar su juego.

La UMA pasa a controlar el partido a partir de ese momento y también en un lanzamiento de falta de Crispi, que toca un rival, despistando a Iván, transforma un empate (M.5), que a renglón seguido permite a los antequeranos mostrar su mejor cara creando ocasiones para haberse puesto por delante hecho que empezó a impedir con sus intervenciones el meta Iván.

Con todo ello y cuando mejor lo hacíán los locales llegaron sendos tantos visitantes, obra de Juan Carlos, el primero de espuela tras disparo de Michel y el segundo en un balón suelto que le permitió encarar a Varela (M.15 y 16).

El 1-3, era el marcador al descanso poniendo más tierra de por medio el equipo de Carlos Sánchez nada más reanudarse el choque tras una gran acción colectiva que finiquitó Michel (M.22). Con este tanto llegaron las prisas a una UMA con demasiado corazón pero con poca cabeza. Demasiado prisas y errores en el pase además de falta de intensidad en su juego sólo pudieron reducir gracias a Chillo con el 2-4, y aunque tras este tanto restaban todavía casi diez minutos para la conclusión el “cinco” universitario se estrellaba una y otra en sus intentos con la férrea y disciplinada defensa de un rival que al final del choque lograba el quinto a través de Gonzalo cuando la UMA a la desesperada jugaba de “cinco”.

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