Algo más que ilusión es la palabra que está queriendo transmitir la directiva que preside Ángel González, en estos prolegómenos de una pretemporada que se presume intensa a tenor de las remodelaciones importantes que se están llevando a cabo en la confección de un nuevo proyecto futbolístico en el que se está desatando un interés mayúsculo a tenor de las incorporaciones efectuadas y de lo que parece está por venir que en caso de consumarse darían todo un vuelco a las opciones de un club que cansado de sufrir año tras año ha tratado de cara a la nueva temporada equilibrar presupuestos fichando con garantías gracias a la labor de Paco Lara, reconvertido a director deportivo, al margen de su papel fundamental también en la defensa del marco.

Tras las confirmnación de una cifra superior a la de la docena de hombres pertenecientes al ejercicio anterior (Lara, Joselillo, Villar, Gonzalo, Balta, Soto, Juan Pedro, Dani Del Pozo, Óscar Herrera, Luis, Germán, Marcos), todo el esfuerzo se viene encaminando a fichar jugadores que aporten su sello y puedan dejar destello de calidad y espectáculo a su paso por el Maulí. Tras Juanillo y Víctor Rueda la pasada semana les tocó el turno, primero a un centrocampista de banda derecha como Marín ex de Algeciras, San Roque y Barcelona At. y a Quique De la Mota un organizador de talento en la medular, militante en las filas de El Palo la última campaña.

Con todo ello los grandes esperados del presente ciclo de fichajes estaban por rubricar su firma haciéndolo llegado el momento en los casos de Coco y Tete, dos jugadores cuyos destellos de inmensa calidad y carisma han venido manifestándose con todo lujo de detalles en cada una de las carreras deportivas. Su vuelta a Antequera tras un inicio de las mismas en la entidad blanquiverde hace ya más de una década vuelve a sembrar de ilusión un proyecto llamado a estar peleando por muy variados objetivos en la temporada que echará a andar en la segunda mitad del mes de Agosto.