Piscina cubierta de Campillos después de las inundaciones

La semana pasada hablamos sobre las inundaciones Campillos y Teba habían sufrido y las consecuencias que habían propiciado. Una de ellas ha tenido que ver con la piscina cubierta del municipio campillero, que después de quedar totalmente inutilizable tras la catástrofe ha acelerado un conflicto entre entre el concistorio de Campillos y el regidor de la piscina.

Desde este periódico hemos podido hablar con José Carlos, arrendatario de la piscina desde hace varios años, José ha mostrado su disconformidad con la posibilidad de que le anulen el contrato de arrendatario de la piscina, después de que, según él, el ayuntamiento maniifieste que «no hay objeto» de contrato, una vez que la piscina quedase arrasada y sin manera alguna de poder utilizarse.

«Cuando entró a gobernar el actual grupo político hace ahora cuatro años, me mostró su disconformidad con que la piscina cubierta hubiera salido a concurso público» manifestaba José Carlos, mostrando así que el problema venía desde hace tiempo. En la llamada atendida a este medio, el arrendatario de la piscina ha seguido denunciando otros problemas que ha tenido con el ayuntamiento a lo largo de estos años y que ahora están saliendo a la luz tras los problemas que ambas entidades están teniendo. «Cuando entré a la piscina por primera vez, pude ver que algunas instalaciones necesitaban arreglo o mejoras, yo propuse arreglarlas yo y que se me restara de la factura de la luz, no me pusieron ningún problema pero ahora argumentan que tienen facturas mías de luz sin pagar, cuando eso no es cierto»

José Carlos ha querido también comentarnos el nuevo contrato que les ofrecen por parte del ayuntamiento «A mi me ofrecen anular el contrato de veinticinco años de la piscina cubierta y de verano, por el contrario me ofrecen un contrato nuevo para la piscina de verano donde me cambian las condiciones que tengo ahora firmadas» comentaba.
Para comprobar el apoyo real que el gestor de la piscina tiene en el municipio, han creado una recogida de firmas en la plataforma change.org, donde se llevan ya recogidas más de trescientas cincuentas firmas, con las que pretende hacer presión al ayuntamiento para poder seguir regentando la piscina una vez esté arreglada, un arreglo que está valorado en más de novescientos mil euros.

El pueblo de Campillos se encuentra dividido con este tema que afecta a una de las instalaciones más visitadas del municipio. Veremos como continúa el conflicto.