La muestra está compuesta por 2.300 piezas de la colección privada de Pedro Pérez Tapia, que se irán renovando progresivamente
El Museo del Juguete de España y del Mundo de Cuevas de San Marcos abre sus puertas al público para que vecinos y visitantes que lleguen a este municipio del territorio Nororiental de Málaga (Nororma) puedan disfrutar de un espacio que se pone en marcha con una exposición que alberga unos 2.300 juguetes del coleccionista privado Pedro Pérez Tapia.
Situado en la avenida Pablo Picasso, en una de las entradas de la localidad, junto a la Oficina de Turismo, la colección se distribuye en tres salas. La primera de ellas está dedicada fundamentalmente a juguetes españoles y con ella, además de contemplar decenas objetos que hicieron las delicias de los niños de varias épocas, se pretende que el público conozca también aquellas empresas jugueteras que situaron a España como una referencia mundial de esta industria durante décadas.
Así, nada más entrar, a su derecha, el visitante encuentra toda una historia del automóvil de juguete, con marcas como Payá o Rico, con referencias desde principios siglo XX de latón hasta modelos de los años 70, pasando por algunos de los primeros automóviles teledirigos que se hicieron en España. Al otro lado, la sala presenta muñecas con referencias tan conocidas como Famosa, con su popular Nancy, u otras elaboradas de porcelana e incluso de terracota o cartón piedra.
Y no son ni mucho menos las únicas rarezas que se pueden ver al inicio, ya que también se exponen juguetes de madera de los años 30 o una “linterna mágica” de 1895, considerado el primer proyector de juguete fabricado en España, acompañado de varios modelos de Cinexin. Locomotoras de la marca Ege, vehículos de guerra, maquetas de tren, payasos, juegos de anatomía o cocinitas y juguetes para hacer palomitas o algodón dulce, entre otros, completan la primera sala.
En la segunda estancia del Museo del Juguete de España y del Mundo de Cuevas de San Marcos la exposición continúa con juguetes de fabricación patria, con una zona especialmente dedicada a los de mesa, donde no falta clásicos como Juegos Reunidos, que se pueden ver junto a una primera edición nacional del Monopoly u otros menos conocidos como Petropolis, de Borrás (1970), especializado en finanzas petrolíferas.
Buena parte de la Sala 2 está reservada a jueguetes internacionales. Los hay de países europeos como la desaparecida República Federal Alemana, como soldados de plomo de 1870 o mecánicos representando oficios como un afilador o un aserradero; Francia, con unos primeros juegos reunidos de la marca Rachez París, o un juguete de carreras de caballos de 1872; Inglaterra, con un coche deportivo de latón de 1905 o una cocina de hierro fundido de 1890; o Italia, Portugal y la extinta Checoslovaquia, con varios automóviles y juguetes de latón de entre los años 20 y 50 del pasado siglo.
También están representados la industria juguetera de Estados Unidos, con objetos preciados como un ‘pintball’; de Japón, con varias locomotoras; de Taiwan, con un loping; de Corea, con una moto de policía; de Hungría, con un juguete de latón de un cohete espacial; de México, con una marioneta de Cantinflas; de India, con maquetas de trenes; de Cuba con una muñeca con el vestido tradicional, o de China, con diferentes modelos de vehículos.
Finalmente la Sala 3 está dedicada a la Historia del Tebeo, con historietas de héroes nacionales como El Jabato y Roberto Alcázar y Pedrín; a álbumes de cromos de diversas temáticas y a libros de escuela nacionales, generalistas y de todo tipo de materias, algunos de la primera mitad del siglo XX; así como un centenar de los populares Cuentos de Calleja y un ejemplar de caballito de arrastre artesanal de 1790.
Un proyecto para complementar la oferta turística “No hay nadie al que le haga más ilusión que haya llegado este día, además de a Pedro, que a mí”, ha asegurado el alcalde de Cuevas de San Marcos, José María Molina, en la inauguración del Museo del Juguete de España y del Mundo, por parte de la delegada del Gobierno de la Junta de Andalucía en Málaga, Patricia Navarro, y el presidente de la Diputación de Málaga, Francisco Salado, junto a alcaldes de varios municipios de la zona de Nororma y el primer edil de Antequera, Manolo Barón.
Con la puesta en marcha, la localidad añade un nuevo atractivo turístico. Pero también un espacio con el que se busca que los más jóvenes aprendan del pasado, los adultos puedan rememorar su infancia y que para los mayores sea un centro de ayuda, ya que también están proyectados talleres para trabajar la memoria en la tercera edad.
En la inauguración, el presidente de la Diputación ha alabado al Ayuntamiento de Cuevas de San Marcos, por haber apostado por “un proyecto que suma a la oferta turística y cultural de la provincia”. “Nos hace más ricos, más complementarios y más únicos”, ha incidido sobre la importancia de que los turistas, cuando lleguen a la provincia, tengan la mayor variedad posible de actividades y lugares para disfrutar y llenar así sus vacaciones.
Igualmente, Salado ha dado a conocer que está previsto que el Museo del Juguete de España y del Mundo forme parte de la nueva marca en la que está trabajando la Diputación, para todo tipo de colecciones: Museos de Málaga.
Por su parte, para la delegada territorial del Gobierno andaluz, esta iniciativa, que se comenzó a gestar antes de la pandemia, es un “ejemplo de que la constancia en los proyectos tiene sus frutos”, además de un nuevo atractivo que contribuye a la diversificación turística que se necesita. “Todos hemos aprendido jugando y aquí se puede demostrar”, ha subrayado.
Los 2.300 juguetes que se exponen no van a ser los únicos que se podrán ver de la colección privada del promotor del proyecto ya que, como ha señalado, en los próximos meses irán renovando la exposición con otras 2.000 piezas más. Todo ello para continuar disfrutando de un museo que tendrá un horario de apertura, de lunes a sábado, de diez a dos y de cuatro y media a siete y media, mientras que los domingos sólo estará abierto en el horario matinal.