Los cambios recientes en la organización de la atención a las Urgencias en el Área de Gestión Sanitaria Norte de Málaga, concretamente al trasladarse el Dispositivo de Cuidados Críticos y Urgencias 2 a Antequera, la tan prometida segunda ambulancia para esta localidad, han conllevado un empeoramiento significativo en las ya malas condiciones de trabajo en las guardias de los profesionales de la Zona Básica de Salud de Mollina. La situación actual, calificada por los propios facultativos «al borde del colapso», agrava el panorama que se mantiene desde hace más de dos décadas.

La zona básica de salud de Mollina cubre actualmente a una población de más de 16.000 habitantes, repartidos entre Mollina, Humilladero, Fuente Piedra y Alameda. Esas históricas condiciones laborales, con un elevado número de pacientes atendidos cada día y un considerable porcentaje de salidas del equipo a domicilio, obligaron a que los médicos y el Sindicato Médico de Málaga comenzasen hace unos quince años a reclamar un segundo equipo de guardia a tiempo completo para esa zona. Desde entonces, pese a que la situación no paró de empeorar, la administración sanitaria andaluza hizo oídos sordos a las reclamaciones, a las que se sumó recientemente la plataforma vecinal creada.

El reciente traslado a Antequera ha empeorado la situación en las guardias de la Zona de Mollina, que cubre a una población de más de 16.000 habitantes

El refuerzo que realizaba el Dispositivo de Cuidados Críticos y Urgencias 2 era absolutamente insuficiente, al tener que ser compartido también con Antequera. Pero ahora, con el reciente cambio y el traslado de este dispositivo a Antequera, las condiciones de trabajo en Mollina y la asistencia a los pacientes en las guardias, lejos de mejorar, han empeorado significativamente.

Pese a las declaraciones de la actual Gerencia del Área Sanitaria Norte de Málaga, los cuatro profesionales contratados, dos médicos y dos enfermeros, a quienes se les ha hecho solo un contrato eventual, para reforzar las guardias de Mollina, son absolutamente insuficientes, pues solo cubren el tramo horario entre las ocho de la mañana y nueve de la noche, quedando a partir de esa hora un solo equipo de guardia en Mollina para cubrir todas las emergencias y las Urgencias más importantes desde las desde las nueve de la noche hasta las ocho de la mañana del día siguiente de esos más de 16.000 habitantes. También desde Mollina, con la nueva organización, tienen que atender las emergencias de la Colonia de Santa Ana, que no pertenece a la zona básica de Mollina, sino a la de Antequera.

Las reuniones recientemente mantenidas de los profesionales, el sindicato, la plataforma vecinal e incluso de alcaldes de la zona, tanto con el consejero de Salud de la Junta de Andalucía, Jesús Aguirre, como con el delegado de Salud en Málaga, Carlos Bautista, y con la Gerencia del AGSNM, «no solo han sido infructuosas, sino que han desembocado en la grave situación actual. La solicitud de ese imprescindible segundo equipo de guardia a tiempo completo para Mollina no ha encontrado respuesta» ha destacado el sindicato.

con la nueva organización, mollina tiene que atender las emergencias de la Colonia de Santa Ana, que pertenece a Antequera

Todo ello conllevará en breve un éxodo significativo de profesionales de la zona básica de Mollina en busca de destinos menos incómodos para trabajar y más cercanos a sus domicilios de residencia. También es previsible una gran dificultad para encontrar a quienes los sustituyan. Con lo que si no se mejoran las condiciones laborales repercutirá a los cuatro municipios y a todos lo que circundan la zona.

Por otro lado, la Atención Primaria del área sanitaria norte de Málaga comprende 4 Zonas Básicas de Salud: Antequera, Mollina, Campillos y Archidona. Es una zona rural, con población muy envejecida, muy demandante de asistencia sanitaria y con gran dispersión, repartida en múltiples núcleos poblacionales, siendo la mayoría de ellos pequeños. A ello se le suman una serie de características que la convierten en un área única dentro de nuestra comunidad autónoma, pues en ella tres de sus cuatro zonas básicas están declaradas como de difícil cobertura, tiene posiblemente la mayor concentración de zonas de especial aislamiento de toda Andalucía y encabeza el número de Zonas Necesitadas de Transformación Social de la provincia de Málaga, si atendemos al número de ellas en relación con la población total.

Todas esas características hacen que la necesidad de profesionales sea elevada, que no sea fácil encontrarlos y el déficit de los mismos, en el caso de médicos de familia y pediatras de Atención Primaria, sea alto. También hace que los profesionales soporten unas elevadas cargas de trabajo en todo este Área Sanitaria, tanto en consulta como en Urgencias.

Ya en 2018 el sindicato de médicos evaluó la necesidad de elevar en un 25%, aproximadamente, el número de profesionales de Atención Primaria para el área sanitaria Norte de Málaga. Aquella apreciación apenas ha cambiado desde entonces, pues a la necesidad de elevar el número de trabajadores para las Urgencias de Mollina, se suma también la de otras zonas básicas (Archidona, Campillos y Antequera) y la necesidad de un refuerzo importante del Dispositivo de Apoyo.

Hay también plazas no cubiertas desde hace años en Campillos, y hay que reforzar las plantillas, con lo que llegamos fácilmente a la cantidad del 25% antes mencionada.

Asimismo, en el Hospital Comarcal de Antequera existe un déficit de médicos que merman las labores asistenciales a los pacientes. Así, falta un dermatólogo, un urólogo, un radiólogo y dos facultativos de Urgencias.