sexual

¿Qué son las enfermedades de transmisión sexual?

Son un conjunto de enfermedades que se transmiten de persona a persona por medio  del contacto sexual, incluido el sexo vaginal, el sexo anal y el sexo oral.

Sin embargo, pueden transmitirse también por el uso de jeringas contaminadas o por contacto con la sangre y algunas de ellas pueden transmitirse durante el embarazo o el parto, desde la madre al hijo.

¿Por qué es importante este tema?

Conocer cómo se transmiten las enfermedades de transmisión sexual, su prevención y su tratamiento es importante para disminuir la incidencia y la mortalidad de las mismas.

Especialmente es interesante que los adolescentes, considerados de alto riesgo para adquirir ETS,estén informados por los motivos siguientes:

  • tienen relaciones sexuales sin ningún medio de protección;
  • son biológicamente más susceptibles a la infección;
  • tienen mayor posibilidad de contraer infecciones con curso clínico asintomático y
  • porque no suelen acudir al médico.

Tipos de enfermedades de transmisión sexual

La mayor parte de las enfermedades de transmisión sexual son causadas por dos tipos de gérmenes: bacterias y virus, pero también son causadas por hongos.  Entre ellas podemos nombrar: Sífilis, Herpes genital, condilomas (HPV), la gonorrea, la sarna y la más grave el VIH o SIDA.

Síntomas

¿Cómo se pueden prevenir?

Para prevenir la  ETS, es fundamental conocer su existencia, los medios de transmisión, optar por una conducta sexual segura y en caso de presentar algún síntoma acudir precozmente a su médico. También es importante no compartir jeringillas.

Nuestros objetivos de prevención y control de las ETS son:

  • disminuir la incidencia
  • disminuir la prevalencia, interrumpiendo la trasmisión y reduciendo la duración de la infección
  • prevenir complicaciones y secuelas en los pacientes afectados

Las actividades encaminadas a prevenir las ETS se agrupan en:

  1. Educación para la salud y promoción del sexo seguro. En los institutos por ejemplo.
  2. Detección precoz en grupos de riesgo.
  3. Inmunización frente a las ETS. Como frente a la hepatitis B en grupos de riesgo.
  4. Vigilancia epidemiológica de los pacientes infectados.

Recomendaciones para estar sano sexualmente

  1. Tener información objetiva y veraz

La información en esta materia es fundamental, por eso la información se debe recabar de fuentes solventes y fiables. También hemos de considerar de dónde recibimos la información en internet, los foros y las páginas no especializadas no son fiables.

  1. Vivir la sexualidad sin miedos, con placer y sin disfunciones.

Esa información tiene, entre otras, la misión de evitar miedos innecesarios, saber si el método que uso como anticoncepción es seguro o no, cuándo y cómo se puede contagiar una infección de transmisión sexual, y cuándo no etc.

Placer con mEdios. Placer sin mIedos.

3. Conocerse y aceptarse tal y como somos

La aceptación como persona única e irrepetible, es por tanto fundamental para llevar una vida sexual sana

4. Mantener relaciones de igualdad y basadas en el respeto mutuo.

Sólo si nuestras relaciones están basadas en el respeto y en la igualdad, podremos disfrutar de una buena salud sexual.

 

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