La Plaza Fernández Viagas de Antequera ha acogido una concentración convocada por los sindicatos estudiantiles y la comunidad educativa con la intención de defender la escuela pública y mostrar su descontento con el nuevo decreto de escolarización que suponen antepone los intereses de la escuela privada y concertada a la pública.

“Se le está dando la posibilidad a esas familias de poder escoger supuestamente una mejora para sus hijos y se le da la posibilidad de volver a una escuela concertada contando con que el 80 por ciento son de carácter religioso. El gobierno lo que quiere es gestionar algo que debería ser un derecho, la escuela pública. Lo que no se puede hacer es quitar presupuestos y dinero en la pública y favorecer a la concertada”, ha comentado Martín Fernández, en representación del sindicato CGT.

Este nuevo Decreto de Escolarización favorece la matriculación en los colegios concertados, estableciendo que “las áreas de influencia se configurarán de forma que las familias tengan la máxima puntuación por el criterio de proximidad al centro del domicilio familiar o del lugar de trabajo en, al menos, un centro público y otro concertado”, es decir, “la posibilidad de que los padres puedan optar a un colegio concertado, aunque no lo tengan en su zona”.

Consideramos que el mantra de la libertad de elección se puede respetar, pero no en detrimento de la educación pública, una educación igualitaria que refleje la sociedad”, ha añadido Gustavo Vegas, jefe de estudios de un centro educativo público de la comarca.

Con el nuevo decreto los centros concertados amplían sus zonas de influencia para que puedan matricularse alumnos que hasta ahora no podían por criterios de proximidad. Los docentes de la escuela pública consideran que “se está acabando con la educación pública dando privilegios a los centros concertados”.

“Pensamos que la educación pública esta para defenderla y apoyarla, yo estudié en la educación pública, soy docente en la pública y quisiera eso para mis hijos, pero con la calidad y los recursos necesarios, y que esos recursos no vayan a menos sino a más, estamos en el siglo 21 y no podemos retroceder”, ha concluido María José García, jefa de estudios del instituto de Sierra de Yeguas.