Un centenar de representantes municipales de 43 localidades de todas las comarcas, incluyéndose Antequera, mantuvieron ayer una reunión de coordinación con el Comité Español de Ayuda al Refugiado (CEAR), Cruz Roja, y la Asociación Comisión Católica Española de Migraciones, con el fin de recibir información sobre el proceso de acogida a familias de refugiados que lleguen a la provincia de Málaga. Mostrando así, los Ayuntamientos de la provincia su total disposición para colaborar con la Diputación y los colectivos especializados de la provincia en materia de atención a emigrantes ante la actual crisis humanitaria de Siria.

La teniente de alcalde delegada de Igualdad, Equidad, Accesibilidad y Cooperación Ciudadana, María Dolores Gómez, acudió a esta reunión, convocada en la Diputación de Málaga y a la que acudieron asociaciones especializadas en la atención a las personas afectadas por la guerra en Siria.

 El encuentro tuvo como objetivo resolver dudas y establecer las líneas de trabajo y mecanismos de atención integral para hacer frente a la atención de estas personas. La Diputación actúa como canal entre las entidades y los ayuntamientos, y que en diversas reuniones anteriores se han ido enumerado las necesidades detectadas por los colectivos, precisando los recursos disponibles por parte de los consistorios. De hecho, se anunció, que tras la reunión de ayer, muchos de ellos ofrecerán albergues y espacios vacíos de sus municipios para la acogida.

Estos espacios deberán contar con una capacidad mínima de 25 personas, y han de estar equipados para cubrir necesidades básicas (cocina, baños, zonas comunes….). Asimismo, además de ofrecer asilo, los acogidos recibirán apoyo psicológico, social y jurídico, además de clases de español y de conocimiento del entorno.

Asimismo, los regidores, técnicos y concejales presentes en el encuentro pusieron de manifiesto el interés y sensibilidad por parte de sus conciudadanos, que se han ofrecido voluntarios para prestar atención a las familias, y que por tanto, recibirán asesoramiento por parte de las organizaciones sobre cómo actuar.

En el caso de Antequera se ha puesto ya en marcha una oficina para inscribir a personas que deseen ser voluntarios para la acogida de refugiados o para aportar otras actividades y ayudas necesarias como clases de idiomas o asesoramiento en varias materias.

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