Desde el inicio de la crisis provocada por el coronavirus y el estado de alarma, son muchas las personas mayores que permanecen confinadas en sus domicilios. Esto ha supuesto que el servicio de teleasistencia haya experimentado en las últimas semanas un importante incremento de llamadas como consecuencia de las dudas que generaba entre las personas mayores esta situación excepcional.

La mayor parte de las personas usuarias del servicio de teleasistencia son personas de avanzada edad, y un gran número de ellas viven solas, y desde el servicio de teleasistencia, a lo largo de estas semanas, se ha podido dar respuesta a numerosas llamadas solicitando información y consultas de todo tipo.

El personal teleasistente deriva las consultas de salud a los médicos, quienes la estudian y llaman a la persona para ofrecerle el asesoramiento adecuado. Con la actuación de este equipo de profesionales médicos, se pretende también evitar que las personas mayores tengan que exponerse a una situación de riesgo como es la consulta médica en sus centros de salud de referencia y contribuir a descongestionar los servicios sanitarios.

No obstante, este asesoramiento se produce siempre que no sea necesaria su derivación a los servicios de salud, en cuyo caso la teleasistencia se encuentra en contacto directo con los servicios sanitarios, tanto con Salud Responde y el 061 de la Consejería de Salud y Familias, de manera que se puedan canalizar todas las consultas y emergencias de forma coordinada.

En definitiva, aún siendo superior a lo habitual, la curva de llamadas al servicio de teleasistencia de la Junta de Andalucía se está estabilizando gracias a los consejos y mensajes de tranquilidad que ofrecen sus profesionales, paliando la incertidumbre existente y contribuyendo a la normalización de la situación.