Pantano de Guadalhorce

Las últimas lluvias han hecho que los embalses de la provincia se recuperen y se sitúen de media en un 45 por ciento de su capacidad. Buenas noticias después de los meses de sequía que han puesto en una delicada situación a las reservas de agua malagueñas. Así, en la última semana las precipitaciones han dejado un total de 70 hectómetros cúbicos de agua en embalses y pantanos, lo que ha supuesto una “importante aportación” y “nos deja un panorama más optimista que el que teníamos antes de las lluvias de esta última semana”, ha señalado el delegado del Gobierno, José Luis Ruiz Espejo.

En estos momentos, destaca el embalse de la Concepción (79,42%), Guadalhorce (53,91%), Limonero (51,97%), Casasola (51,29%), Conde de Guadalhorce (48,91%), Guadalteba (34,63%), y La Viñuela (30,38%).

No obstante, Ruiz Espejo ha indicado que “no hay que lanzar las campanas al vuelo” y ha recordado que el agua es un “bien finito” y como tal “debemos tener prudencia, seguir haciendo un llamamiento al consumo responsable y a la optimización de este recurso en los diferentes usos que hacemos del mismo”.

El delegado del Gobierno ha indicado que junto a las aportaciones directas que han recibido los embalses y pantanos de la provincia hay que sumar también las captaciones subterráneas, cuya capacidad también se han visto mejoradas.

El delegado del Gobierno ha recalcado que cuando finalice el periodo de lluvias, que según las predicciones aún no ha concluido, los técnicos de la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, analizarán la situación en cuanto a almacenamiento, capacidad y garantía de abastecimiento y se analizarán las medidas adoptadas en el último trimestre de 2017 para establecer las medidas a tomar dentro del escenario de decreto de sequía que se había planteado después de este ciclo de sequía tan prolongado.

1 Comentario