La visita a Manzanares le permitió al BeSoccer CD UMA Antequera recuperar la sonrisa en la pista. Necesitó completar un auténtico partidazo en el que se vio obligado a remontar dos veces una desventaja de dos goles. Confió en el plan de juego marcado y le funcionó porque volvieron a ser visibles las señas de identidad que se centran en competir sin escatimar esfuerzos, estar dentro de la disputa por los puntos y atacar con precisión a partir de la defensa. Matamoros y Álvaro colocaron por delante a la formación local con una diana al final de una parte y al principio de la otra.

Luego ya se produjo una remontada de carácter que partió de los goles de Alvarito, Miguel –por partida doble–, Barona y Burrito. Es muy complicado ganar en Primera División y, cuando se logra, hay que saborearlo y darle el valor que se merece, más aún, al superar a un adversario que comparte el objetivo de la permanencia.

Los tres puntos son una inyección importantísima de moral y confianza para dar un paso adelante en la pugna por la permanencia y encara con energía positiva una semana que viene en la que jugará el miércoles en Peñíscola los cuartos de final de la Copa del Rey a las ocho y el sábado recibirá a Noia Portus Apostoli en el Pabellón Fernando Argüelles.