Asaja, COAG, UPA y Cooperativas Agro-alimentarias de Andalucía denuncian que esta norma, muy dañina para el modelo social y profesional de la agricultura, se ha hecho a espaldas del sector, en plena pandemia, con total falta de transparencia y sin dar a conocer ni un dato.
Las organizaciones agrarias andaluzas Asaja, COAG, UPA y Cooperativas Agro-alimentarias manifiestan su rechazo al Real Decreto de Convergencia aprobado en el Consejo de Ministros por el que se regulan las ayudas de la PAC para las
campañas 2021 y 2022, es decir, más allá de lo previsto en el actual marco financiero comunitario, y antes de que entre en vigor la nueva PAC en 2023.
Las organizaciones denuncian que «esta norma, muy dañina para el modelo social y profesional de la agricultura, se ha hecho a espaldas del sector, en plena pandemia, con total falta de transparencia y sin dar a conocer ni un dato». Por ello, OPAs y Cooperativas Agro-alimentarias anuncian movilizaciones en cuanto el Covid lo permita, «dispuestos a revertir esta situación».
Para el sector agrario andaluz, «la aprobación de esta norma supone un grave perjuicio para el modelo social y profesional de la agricultura, que es clave para la economía andaluza, y va a generar un daño irreversible a un sistema productivo que distribuye riqueza, que genera el 90% del empleo agrario, gestiona el territorio y es el que fija población en nuestra región».
Asaja, COAG, UPA y Cooperativas Agro-alimentarias consideran que «lo aprobado por el Gobierno es una reforma brutal con una convergencia casi total (del 80% de los niveles de ayuda de cada agricultor respecto de la media) de forma inmediata, sin transitoriedad, y sin límite de impacto en la renta individual de los agricultores. Se trata de una convergencia acelerada y profunda de los derechos de pago básico, que es del todo inoportuna, injusta y gratuita (sin obligación por parte de la UE), y que no va dirigida a fomentar la producción, ni el empleo, ni a luchar contra el despoblamiento, pues pretende plantear una tasa plana que primará la superficie sobre la producción».
Para finalizar, las organizaciones agrarias y cooperativas reiteran su compromiso de «luchar para que esta situación cambie y se respete el esfuerzo ejercido durante generaciones por este sector clave para el presente y el futuro de la alimentación y de Andalucía».