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Piden la paralización del proyecto hasta que no se añada una cláusula en el contrato que certifique que, en ningún caso, este centro podrá concertar líneas en el futuro

Ante la reciente noticia de la próxima implantación del centro educativo privado Fénix School en Archidona, las comunidades educativas de los cuatro centros públicos del municipio han mostrado su total preocupación por el peligro que puede suponer para la existencia y permanencia de la Educación Pública en Archidona.

Una de las principales preocupaciones de las AMPAS y del Claustro de docentes es que en un futuro no muy lejano Fénix School pase de ser 100% privado a ser un centro con algunas líneas concertadas, aunque la alcaldesa de Archidona, Mercedes Montero, aseguró que una de las bases esenciales del convenio de colaboración firmado con la empresa es la de no concertar plazas con la Consejería de Educación.  «El temor es bien real ya que a día de hoy el gobierno municipal es incapaz de asegurar esto. Una vez concedidas todas las licencias para que puedan edificar en Archidona, la concertación de algunas de sus líneas no depende del Ayuntamiento sino de la Delegación de Educación», recalcan en un comunicado.

Y es que la comunidad educativa ha querido recordar el esfuerzo que se está haciendo para mantener el número actual de líneas por centro público, que año tras año corre peligro debido a la disminución de la natalidad y al «intento por parte de la Delegación de Educación de ahorrarse docentes», siendo la principal consecuencia el aumento de la ratio/ alumno por clase. «La creación de un nuevo centro educativo privado favorecerá inevitablemente la desaparición de algunas de las actuales líneas de la pública aumentando de facto la ratio alumno por clase pasando por ejemplo en la ESO de los 18 u 20 actuales a los 30 por clase.

Otro de los puntos que han denunciado ha sido el hecho de que los recortes en los presupuestos hacen que, para la escuela pública, sea imposible contar con instalaciones comparables a las que anuncia Fénix School, lo que provocará la segregación del alumnado por sus condiciones sociales, y por consiguiente, la desaparición de líneas e incluso el cierre de algún centro público actual. «Cuanto más se devalúa la pública, más esfuerzos hacen las familias para matricular a sus hijos en la privada concertada. ¿Quién pagaría una cuota mensual para matricular a su hijo si en la pública se tuviese también un polideportivo, una piscina cubierta y unos talleres nuevos con última tecnología?».

Desde la comunidad educativa afirman desconocer el acuerdo firmado entre el Ayuntamiento y la empresa privada en referencia al compromiso laboral y de empleo para los vecinos del pueblo, una de las principales razones por las que el Consistorio ha movilizado este proyecto. «La construcción de este centro privado puede generar trabajo durante los meses de la construcción pero lo que se quedará con el tiempo son los 30 puestos de trabajo directos relacionados con Fénix School, los mismos que se pueden acabar perdiendo de cerrarse algunos de los centros públicos».

Por último, han mostrado su descontento con el gobierno municipal por no haber debatido con antelación esta decisión «trascendental» o al menos, haber informado de la misma previamente a la firma del permiso de obras y el proyecto.

Por todo ello, piden la paralización del proyecto para aclarar las condiciones del contrato. «Hay que exigir que se añada una cláusula en el contrato que certifique que en ningún caso este macro centro privado podrá concertar líneas en el futuro«.

Aunque la regidora aseguró durante la presentación del proyecto que esta noticia no debería suscitar agravios entre la Educación Pública de calidad y la Educación Privada, las comparaciones han sido inevitables.