El jugador ceutí, todo corazón en la cancha, certifica su continuidad en la escuadra universitaria como uno de los guerreros más incansables que animan a no dejar nunca de luchar
Lo que te quita el deporte, también te lo da sí crees en que es posible cumplir un objetivo con esfuerzo, dedicación, compromiso y sacrificio diario. Esta es la experiencia adquirida por Daniel Ramos Pérez desde su llegada al BeSoccer CD UMA Antequera.
En cinco temporadas ha vivido tres ascensos y dos descensos, pero el momento más duro llegó con una grave lesión en su rodilla derecha que le dejó sin la posibilidad de jugar por segunda vez en la máxima categoría del fútbol sala nacional.
No se vino abajo, se armó de fortaleza y se tomó el tiempo necesario para recuperarse al 100%. Muchísimos meses alejado de las pistas y sin poder hacer lo que más le gusta. El 18 de agosto, en Frigiliana, volvió a sentirse jugador al disputar unos minutos en un amistoso de pretemporada con el CD El Ejido.
Tete mantiene su confianza en el jugador ceutí y este así lo refleja. “Contentísimo de unirme a este proyecto en Primera División. Este es el año en el que todos estamos con una ilusión muy grande de conseguir el objetivo. Orgullosísimo de la temporada que ha pasado y que el cuerpo técnico siga contando conmigo para esta aventura en la máxima categoría, que esperemos que sea la definitiva”. El dorsal 9 también hace un balance de lo vivido en la última campaña. “La he disfrutado al máximo, de cada momento, entrenamiento, viaje y partido, porque pasé 11 meses muy duros fuera de las pistas y volví con muchas ganas de disfrutar de este deporte y con esta familia formada por los compañeros y el cuerpo técnico. La he exprimido al máximo y qué mejor forma de rematarla que con tantas alegrías”.
Dani Ramos quería regresar a la élite por tercera vez y, ya que lo ha logrado, tiene muy claro que lo va a disfrutar al máximo, como solo él sabe hacerlo, y aportando todas esas cualidades ofensivas y defensivas que ha ido puliendo desde su incorporación a la entidad. “He crecido y mejorado mucho en todos los aspectos; en el deportivo y en el personal que son ya 6 años. Ahora soy un jugador más maduro y enriquecido tácticamente”.