Ocho propuestas, ocho que nos alumbran en esta hora nocturna que se avecina, temas cargados de amor, soledad y distancia. Melody Gardot y sus coqueteos con el amor, Charlie Haden y su Quartet West ahondando en las posibilidades de los standars o la irrefrenable potencia de The Bad Plus, justifican nuestras intenciones; al tiempo, nos sentimos protagonistas derivando nuestras intenciones hacia la maestría de que nos dejó hace tan solo uso días: Chico Hamilton. Mapas y deseos… geografías y sentimientos… asideros que nos sirven cuando la noche cae para explicar también sus soledades. La música acompaña y sirve de refugio en el que explorar sus rincones oscuros, dejándose mecer por la brisa lejana que nos recuerda a nosotros mismos. Todo esto y mucho más es el jazz…

1 Comentario