Imbroda ha explicado que una de las medidas de seguridad para la vuelta a las aulas será la realización de pruebas PCR a profesores y alumnos a través de las delegaciones de cada provincia

El consejero de Educación de la Junta de Andalucía, Javier Imbroda, ha visitado las instalaciones del colegio público San Juan en Antequera con motivo del inicio del Programa de Refuerzo Estival impulsado por la administración autonómica por segundo año consecutivo.

Aunque en un inicio la implantación de este programa era «una convicción de ofrecérselo a nuestros niños», este año «se ha convertido en una necesidad«, ha expresado Ibroda refiriéndose a las consecuencias que ha traído consigo la pandemia en el ámbito educativo. Según el consejero, se ha triplicado la participación de centros, docentes y alumnos, mostrando así su satisfacción de que «todo marche tan bien».

Este programa se unirá al refuerzo individualizado del plan de acogida de la Junta que los centros tendrán en el primer trimestre para aproximadamente 90.000 niños «que se han desconectado» debido a la brecha digital, ya que cerca de 30.000 niños carecían de los dispositivos electrónicos necesarios; por falta de interés, porque no han tenido el apoyo de la familia «y por multitud de circunstancias», ha explicado Imbroda.

Además, estos refuerzos se complementarán con un plan integral que se desarrollará durante todo el curso escolar y que comenzará en septiembre con todas las medidas de seguridad. «Ya teníamos anas de ver a los alumnos de vuelta a las aulas».

Imbroda ha explicado que una de las medidas de seguridad para la vuelta a las aulas será la realización de pruebas PCR a profesores y alumnos a través de las delegaciones de cada provincia. «Ya se están realizando en los programas de refuerzo, en las pruebas de acceso, en selectividad y hasta ahora no ha habido incidencias».

El Consejero ha aclarado que los más de 6.000 docentes que se contratarán de cara al nuevo curso para poder llevar a cabo la reducción y ajustarse al ratio de almunos en las clases se repartirán en función de las necesidades de los colegios. «Dependerá de la demanda, tanto en la pública como en la concertada».

En cuanto a las aulas prefabricadas que en concreto se encuentran en Antequera en el colegio Romero Robledo y en el instituto de  Los Colegiales, el consejero ha informado que su objetivo durante la legislatura es eliminar el 60% y «en esa planificación de 20, 27 alumnos, el 100%».