La gota fría dejo más de 200 litros por metros cuadrado. Una imagen devastadora. El 28 de septiembre de 2012 quedará marcado en el calendario de más de 8.000 personas que se vieron afectadas por las lluvias torrenciales que asolaron varios pueblos de la provincia de Málaga.

Puentes destrozados, casas inundadas o negocios que desaparecieron entre el fango. Un escenario que jamás olvidarán aquellos que lo perdieron todo. La mayoría de los afectados no ha recibido nada de las administraciones públicas, tan sólo aquellos que tenían aseguradas viviendas o negocios.

Los municipios de Villanueva del Rosario y Villanueva del Trabuco quedaron arrasados por las lluvias, Álora también. Con menor intensidad, las precipitaciones también calaron en el Valle de Abdalajís, la zona de Bobadilla en Antequera, Mollina y Archidona.

Una riada que se llevó por delante la vida de dos ancianos octogenarios en Archidona y Álora y que provocó pérdidas económicas de más de 7,5 millones de euros. Unos 600 efectivos trabajaron para solventar los daños ocasionados por las copiosas lluvias caídas.

Hoy se cumplen dos años de esa catástrofe y en algunas zonas aún quedan las huellas de la tempestad.

Es el caso de Álora, donde 70 viviendas se vieron afectadas por el desbordamiento del río Guadalhorce en distintos puntos, de las cuales unas 30 tuvieron que ser desalojadas. Las pérdidas ascendieron a unos 500.000 euros, arrasando toda la red de agua potable de la localidad, además de cinco pozos. Asimismo, la riada se llevó por delante dos puentes que aún no han sido repuestos.

De un lado, el puente de hierro, que une la barriada El Puente y La Estación, aún no ha sido reconstruido después de que, literalmente, se lo llevará el río. Su ausencia afecta a 1.500 vecinos que tienen que hacer un rodeo de 4 kilómetros. Tampoco se ha repuesto el puente donde se encuentra la salida de emergencias de los túneles de Abdalajís y, según explica el alcalde, José Sánchez Moreno, «en caso de que hubiera un accidente en los túneles, los coches no podrían llegar». A todo ellos se suma la necesidad de limpiar el cauce del río, una reivindicación que llevan años clamando vecinos y Ayuntamiento.

«Nos hemos visto totalmente abandonados por la Junta; no hemos recibido nada. El puente de hierro lo tenían que reponer y no lo han hecho, porque dicen que no hay dinero», lamenta el munícipe, que dice sentirse también abandonado por el Gobierno central, que solo ha aportado 70.000 euros de unos trabajos que se hicieron de urgencia y ahora no tiene forma de justificar, por lo que «seguramente nos quitarán el dinero».

Otra de las zonas devastadas por las lluvias fue la calle Arrollo de Villanueva del Rosario. En esta vía paralela al río, 170 familias se vieron afectadas. Los daños afectaron a un centenar de viviendas, fincas rústicas, empresas, naves industriales, cocheras e infraestructuras municipales. Un desastre que ocasionó una merma de más de 3 millones de euros en los bolsillos de vecinos y de la administración local.

En este municipio, explica el regidor, José Antonio González, dos familias han renunciado a sendas viviendas de VPO por miedo a que se vuelva a repetir lo ocurrido en septiembre de 2012. «Cuando se hicieron los daños pensábamos que el Estado se iba a hacer cargo en su totalidad, pero nos hemos quedado con la miel en los labios; sólo podemos arreglar una parte», expone el munícipe, que explica que no se ha hecho nada antes porque «si no el Estado no nos iba a dar ninguna cantidad».

Villanueva del Rosario ha recibido 190.000 del Estado: «de las 11 actuaciones que les correspondían tan sólo han aceptado 5, por lo que el resto las haremos con recursos municipales». Además, el municipio se ha beneficiado del arreglo de infraestructuras a cargo de la Diputación de Málaga, por importe de 300.000 euros, aportando la misma cantidad la Junta de Andalucía.

Aún quedan por reparar los desperfectos de la calle Arroyo, en la que se ha actuado a medias, ya que los daños ascienden a 600.000 euros. Además, quedan por recuperar varias calles y puentes, lo que eleva la factura a más de un millón de euros, que tendrá que ejecutar el Ayuntamiento en varias anualidades, según explica el alcalde.

Por su parte, Villanueva del Trabuco sufrió pérdidas que rondaban los cuatro millones de euros según calcularon en su día los técnicos de la Diputación de Málaga, la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento.

Cayeron 235 litros por metro cuadrado en unas dos horas, lo que ocasionó el desbordamiento del río Guadalhorce y del río Chavo, e inundó gran parte del municipio, afectando a más de 100 familias que vieron entrar el agua en su casa hasta los dos metros de altura. Asimismo, desaparecieron la depuradora, caminos, tuberías?

A diferencia de las otras, esta localidad ha recibido importantes ayudas de las administraciones públicas. Entre ellas, unos 2,4 millones de euros de la Junta en los que se incluye la reposición de la depuradora, que está en proceso de licitación. El Ejecutivo ha contribuido con 462.000 euros, a lo que se suman las ayudas de la Diputación de Málaga.

No obstante, aún queda por reponer la depuradora y encauzar el arroyo del Chavo para evitar su desbordamiento, pero el regidor Antonio Vegas insiste que en este año estará todo solventado, y reivindican a la Junta que acometa el encauzamiento de la parte alta del Guadalhorce. «Cuando llega el 28 de septiembre tengo un sentimiento de pena, pero recuerdo la valentía, el coraje y el amor del pueblo, que demostró que los trabuqueños nos remangamos y somos capaces de superar las adversidades».

Los alcaldes de los tres municipios critican la actuación de la Consejería de Administración Local y Relaciones Institucionales de la Junta de Andalucía por dejar sin ayudas a los municipios afectados, al sacar la orden de subvenciones a partir de octubre de ese mismo año.