Antequera superó en el primer semestre las 314.000 visitas situándose Los Dólmenes y El Torcal, dos de los sitios protegidos por la Unesco como Patrimonio Mundial desde 2016. Si a esto unimos la popularidad alcanzada por el Caminito del Rey sin duda el incremento está siendo prácticamente exponencial con respecto a hace apenas unos años.
Sólo queda ser capaces de lograr, esta vez sí, que las estadísticas de visitas se conviertan en un incremento de las ventas y el empleo.
Que el turista no pase de largo y que el perfil del visitante sea cada vez de un mayor poder adquisitivo son dos retos que sólo podremos conseguir complementando esos reclamos del patrimonio histórico y natural con otras actividades, equipamientos y servicios.
El esfuerzo de las administraciones se tiene que complementar con el de un sector privado unido y decidido. ¿Resucitar el CIT, organizando el colectivo dentro de la Acia?